PIKI
EN LAS NOCHES FRIAS DE ALGUN
LUGAR REMOTO, SE ESCONDE ENTRE LAS PENUMBRAS
UN GATO CURIOSO Y
SIGILOSO, A LA ESPERA DE CAPTAR SENTIMIENTOS TRISTES Y LUGUBRES, DE NIÑOS CON
ENFERMEDADES EXTRAÑAS Y POCO COMUNES, EL CUAL SE CONECTA CON ELLOS MEDIANTE SUS
SUEÑOS Y VISITA DURANTE LAS NOCHES, USA SU RONRONEO PARA ALIVIAR SUS DOLORES,
TRISTEZAS Y DESILUSIONES. RECOSTADO EN LA ALMOHADA ACOMPAÑA AL NIÑO HASTA
CANALIZAR SU ENERGIA MAGICA Y MIENTRAS DUERME EL NIÑO, PIKY LE MUESTRA LO BELLO
DE LA VIDA, LOS DIAS FELICES Y COLORES CALIDOS DEL AMOR, LLENANDO DE ESPERANZA
Y ALEGRIA SU NUEVO DESPERTAR.
Piky es un gato
solitario que escapo de casa muy joven, buscando a su mama que una tarde
desapareció, en el proceso de ubicarla se dio cuenta que tenia la habilidad de
sentir y escuchar lamentos de pena y soledad, lo que era extraño es que solo
podía percibir estos sentimientos de niños.
Saltando por los
techos y espiando por las ventanas, pudo sentir con mucha intensidad a un niño del
cual brotaba mucha tristeza, ya que no entendía porque no podía salir a jugar
como los demás niños de su edad, el niño buscaba con su mirada detrás de las
cortinas blancas el rebote de la pelota que iba y venia en el patio posterior.
Las carcajadas
avivaban en él su ímpetu por descuidar a su madre y salir al patio colorido y
bullicioso
Mientras calculaba su
salida, observo sus zapatitos, el rojo y frio piso, consultado a su conciencia
si era capaz de soportarlo y finalmente salir, el tiempo de espera se esfuma y
mamá lo ve volteando la pared celeste de la sala, en un paso le dio alcance lo
cargo en brazos y le dijo con mirada tierna ¿a dónde vas pequeño mío?
recordándole que debe tomar los medicamentos que ya es hora otra vez de tomar
ese coctel cruel de piedritas blancas que tienen muy mal sabor y lo motivan a
dormir.
Es aquí cuando Piky
aprovechará la oportunidad de buscar una ventana abierta, un espacio reducido
para ingresar a la habitación del pequeño, ya dormido Teo tiene un espacio en
blanco dentro de su conciencia, acomodado en la almohada y muy suavemente
recostado a su ladito, rodea su colita como antena y empieza a conectar su
energía mágica con la del pequeño, empieza a pintar de colores y flores
perfumadas el sueño del inocente, ahora puede ver la pelota, tocarla, puede
saltar y estirar sus manitas, mojarlas con agua del piso que dejo el rocío de
las flores que rodean su mundo, ahora alegre y risueño, abraza al gato y sus
bigotes le rosan la mejilla
desprendiendo carcajadas sin control.
Piki ha llenado de
esperanza y ganas de luchar a Teo, el cual sonríe recordando
Los juegos y colores
que compartió en sus sueños con aquel gatito juguetón
Ahora con muchas ganas
comerá sus verduras sin reclamo tomará sus medicamentos
Alentado por aquel
amigo desconocido de largos bigotes
Con la ilusión de
volverse a encontrar por las noches
Teo deja las ventanas
abiertas y mientras llega la noche
Escucha el susurro
del viento en suave melodía
La cual acaricia su
rostro y silbando melodías nuevas
El sol se despide
lentamente y las sabanas blancas y almohadas suaves
Se alistan a recibir
al huésped desconocido aun para el niño
Toma su coctel de
medicinas y acurruca su osito para dormir
Se escucha ya trepando
por las calaminas
Los pasitos de Piki, la
cual trae más juegos y travesuras
Que aliviaran el
dolor de Teo e incrementara mas las ganas de vivir
De tocar a mamá disfrutar
de sus mejillas, acariciar su cabello largo
Se nota como va
ganando la batalla en sus pasitos apresurados
El rosado de sus
mejillas y el brillo de su cabello
Sueños tan lindos y
llenos de esperanza
Ilusión que crece y
crece
Teo pronto estará
sano y PIki desaparece.
Galia Iquira
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