RATO EN BREGA
Llamar
por el nombre de la abuela a la hija, y fue porque la tiene de titular del
correo; le dije feliz día y le deseé un alentado inicio de semana a quien Dios
tiene en su santa gloria. Ella lo rectificó, y me entró como una bobadita, la
representación de una viva encauzando el mensaje... Ahora es saludarla a su
nombre, bregar no equivocarnos y dejarla quietecita, como debió ser desde el
comienzo. ¿Pero y los imprevistos que tendrán pie con base a nuestra pasada?
Desde el accidente que nos despidió hasta los que se enteran luego y los malos
hablares: seremos estrujados por la concurrencia, la manchedumbre que
sobrevivirá unas horas más en el acontecimiento: la que desearíamos verter un
poco, así cochina y dando nóbeles a entreguistas, pero en ella, tarde en la
cama, masticando el deseo que se pierde.
Sacarle la fuente al ensayo de la antigua y enfrentarme en
plenario con los adjuntos. Nada se moverá de forma que ni el Parque de Artes y Oficios
detenga sus exposiciones; algo sucederá entre los atollados, los de la barrica
y el sucesor. La línea editorial mantendrá sus arrastres, solo nosotros
intentaremos desprestigiarla y actuar de modo partidista por uno que tiene lo
suyo y lo comparte. Lo serio es con él; una crítica en «alguno» pero la
sentencia directa, lo saben los que les duele, y termine el año director, hay
que sacarle un libro al contrato.
Veremos en qué termina la sangre, si se encascara o la
absorben los que debieron permitir el caemos a las manos y un contratexto, la
respuesta al ataque. Verdad que nuestros argumentos serían piedrillas al escudo
doctoral, y es asunto que en últimas debe ser ofendido por ellos: la nuestra
ofensa vendría por las hipótesis de propiedad intelectual, amiguismo y
favorecimiento; los hayo en la misma atracadera, fulgentes solo de dos
europeolatinoamericano la tradición y castellana la lengua. Aunque la paz ya
fue otorgado y estos me recriminen, enemigos y todo, lo simple del campeche y
la casa de estudios desconocida y mi franca aparición en la escena que les
pertenece a los sabedores comunicacionales, doctorados y cátedras aseguradas.
—Evacuando señor que esto le incumbe.
Y qué decirles sino los espero abajo: ¿algo de beber?
Este cuadro para formas las parcelas. Integrar los
espejismos, aliviarnos de infantería, pasarle el tomo al golpeado, resarcir la
huelga con los detritus de la vacancia. Portafolios, sintonías, estertores
ubicables en Lima al segundo de la semana, o los viernes con T. L. que viaja
leyendo y grabando a sus colegas. Es mi ahora y con él me entiendo: lo reconocible,
la manifestación que no entresiglo pero gastante, una porcionadera-casuística.
¿Qué aprender del contrario se lo retiene fijo en eso no es
lo deseable? Por caso la filóloga ya sabe titular columna y en todo lo visible;
está en el taller y luego la reciben. El sentido es grecorromano yo podría
distribuirlo en precolombina y euroasiática; la dicha en su avance y los
premios que la avalan, uno en los senos independientes, la proyecteadera desde
Ciudad de México, una hormiga tragando un tsunami.
La actividad no es recompensa porque sí, a la noche del
domingo, cuando las velas se agotan y los platos, limpios, preparan ensuciarse.
Tal vez dejando el proceso, los caminos desarrollando un concluible: andar la
gestión con nosotros en ella, así en el registro de los líderes o en
colaboradores segundarios.
Que se empolle, en la edad sugerida, la destinación al
concuerdo, o un conocido ábrete a la bendiga del claustro. Pero la constancia
del que ha erigido sus órdenes y las recomendaciones echadas, juego con el
estornudo y las periféricas movidas al ruedo. Alistarse en una corriente, o en
muchas que se agrupen o en solo una, grande y nerviosa, y darle granos de arroz
por alimento si come, estimularla a fondo con las participaciones anteriores al
acuerdo, al plan en ciernes. De aquí saldrá la columna «Tumbrales».
Alejandro
Zapata Espinosa (Itagüí, Colombia, 2002): licenciado en Literatura y Lengua
Castellana (Tecnológico de Antioquia) y maestrando en Educación (Universidad
Santiago de Cali). Miembro del Comité Editorial de Contacto Literario (Armenia, Colombia). Blog Archivo Cantera:
<https://archivocantera.blogspot.com>.

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